En la “caja de comentarios” del Blog http://www.teatroaficionado.blogspot.com/, maru-jasp dejó el siguiente comentario:
El teatro aficionado no se paga: los ayuntamientos que organizan certámenes y festivales de teatro aficionado tienen la mala costumbre de no pagar en tiempo y forma, y empezamos a estar más que hartos.
A raíz de esta reflexión Carolus comenta:
Pretender que las administraciones paguen pronto es de ilusos. Pero...¿que propones hacer para evitarlo? ¿dejar de actuar en las muestras y certámenes que organizan?
No puedes pelearte con todos los ayuntamientos de España, porque...todos hacen lo mismo. ¿No será que hay razones para que sea así?.
Los procedimientos administrativos de las administraciones locales son largos y tediosos. Son muchos los controles y fiscalizaciones a los que estan sometidos y por eso andan con pies de plomo.
Este comentario y sus respuestas, nos sugieren que no estaría mal reflexionar de una forma distendida sobre la forma en que los ayuntamientos tratan al Teatro Aficionado.
Son muchos los Ayuntamientos, de todas las comunidades, que organizan eventos relacionados con el Teatro Aficionado (Muestras, certámenes, festivales, etc..), algunos de ellos otorgan premios y otros se limitan a ofrecer un repertorio de lo que se cuece en Teatro Aficionado, en el ámbito nacional. En algunos casos las compensaciones son razonables y en otros tan escasas que apenas sirven para cubrir gastos.
Tal es la presencia y el protagonismo de los ayuntamientos en las programaciones de teatro aficionado que, si se suprimieran estas, apenas quedarían unas pocas salas que seguirían programando teatro aficionado.
Parece justo reconocer que gracias a los Ayuntamientos, y sus respectivos festivales o certámenes, muchos grupos tienen más oportunidades de mostrar su trabajo. Pero los ayuntamientos ¿programan teatro aficionado por promocionar o difundir la alternativa no profesional del teatro, o porque les resulta más barato ofrecer cultura de bajo coste?.
Los grupos hacen su trabajo con toda la dignidad de la que son capaces y cumplen con su compromiso escénico lo mejor que pueden y saben. Pero el problema viene a la hora de cobrar. Los Ayuntamientos pagan tarde y a veces mal. ¿A que se debe esta falta de agilidad en los pagos?.
Hay eventos en los que los ayuntamientos pagan a “pie de escenario” como es el caso de las actuaciones de ciertos artistas “consagrados” que de otra forma no accederían a actuar por tener ofertas suficientes para poder elegir y descartar.
¿Por qué en el caso del Teatro Aficionado no se hace algo similar?. En el caso de no poder pagar en el acto ¿Cuál es el tiempo razonable para que se pague una actuación? Estando sometidos, todos los ayuntamientos de similares características, a las mismas exigencias administrativas ¿Por qué algunos ayuntamientos pagan a los tres meses o antes, y otros llegan o superan los 9 meses de retraso?. ¿Son los Ayuntamientos victimas de procedimientos administrativos excesivamente burocratizados, o son los grupos victimas de los ayuntamientos ineficaces?. ¿Ayuda la confección de listas negras de ayuntamientos morosos a solucionar el problema?. ¿Existe alguna alternativa que nos permita llegar a la mayoría de los ayuntamientos para hacerles reflexionar sobre este problema?
El debate queda abierto. Se agradecen las opiniones.
Yo opino que independientemente de que los Ayuntamiento tengan sus procedimientos y que, muy lógicamente, tarden cierto tiempo en pagar, aquellos que pasan de los 2 meses de pago, es debido, no precisamente a los procedimientos por los que deben pasar, si no a su defectuosa eficiencia para hacerlo.
ResponderEliminarDefectuosa, bien porque todo el ayuntamiento es defectuoso y allí nadie trabaja como es debido o si no, peor aún, por aquello de que "Éstos (aficionados) no viven de esto y como lo hacen por gusto, no pasa nada que se les pague un ‘poquito’ más tarde" (que también se oye).
En cuanto a los Certámenes, en efecto, también hay de todo: Ayuntamientos y organizaciones que REALMENTE se preocupan por promover un buen certamen de teatro aficionado, por llevar un buen y variado teatro aficionado y cubriéndolo con una dotación económica justa y digna... Y por otro lado hay ayuntamientos y organizaciones que se les ve el plumero en demasía organizando (o mejor dicho, mal-organizando) certámenes de Teatro aficionado solamente por cubrir una oferta cultural en la localidad y porque es barato: ¿para qué contratar un par de obras profesionales de calidad si con el mismo dinero traemos 8 grupos amateur?, por ejemplo... A estos señores: ¿no se dan cuenta que con 200 o 300 € no se puede movilizar un grupo de teatro amateur, por muy teatro amateur que sea?... Económicamente en un Certamen importa tanto o más los premios de primeros puestos como las compensaciones económicas para los gastos que tienen los grupos no ganadores.
Y es que, desgraciadamente el Teatro aficionado no se hace POR dinero, pero sí CON dinero... Y esto parece ser que ciertas personas y organizaciones, no lo entienden o no lo quieren entender.
No estaría de más llevar a cabo lo que se nombra en este artículo: hacer un compendio de ayuntamientos morosos y certámenes descarados para negarles la presencia del Teatro Aficionado... Triste decisión y muy difícil de llevarla a cabo. Pero pienso, que es la única que daría en el clavo.
Saludos.